Para cualquier edificación es importante contar con materiales resistentes, duraderos y con buenas propiedades para asegurar desde los cimientos, las estructuras y las partes superiores de la edificación, que cuenten con un buen soporte de carga  y así la construcción se mantenga rígida ante cualquier siniestro que pueda afectar  su estructura. Es por ello que es conveniente conocer los materiales que se pueden integrar en las construcciones para que puedan tener un uso ideal y los resultados en tu proyecto arquitectónico sean eficientes y satisfactorios. Por tanto, en este blog abordaremos los usos y características de la malla electrosoldada, para que en caso de estar interesado en este producto lo dispongas adecuadamente y tengas beneficios en general en la obra.

La malla electrosoldada, principalmente está fabricado con barras de acero pueden ser corrugadas o lisas laminadas en frío, que  se cruzan unas a otras en forma transversal y longitudinal, de manera que van formando una cuadrícula de acero flexible, pero muy resistente una vez colocada. Todas las barras están soldadas en los puntos de intersección, su soldadura evitan que se rompa la malla al ser cortada o manipulada.  

Para la elaboración de la malla electrosoldada se utiliza como materia prima el alambrón, el cual es laminado en frío que adquiere gran resistencia a la tensión. Este producto es fabricado bajo un sistema de calidad ISO 9002 certificado por BSI. En comparación con los sistemas tradicionales, la malla electrosoldada se caracteriza por estar disponible para ser instalada en las diferentes construcciones. Convencionalmente, se utiliza como armadura de refuerzo, que se pueden traslapar para distribuir cargas en elementos estructurales.